La cocina y el baño -las dos estancias potencialmente más funcionales de una casa- son también el centro de atención de casi todas las casas en venta.
Es por lo anterior que son dos lugares importantes, en los que se debe invertir dinero a la hora de preparar una casa para la venta. De hecho, según una reciente encuesta de consumidores realizada por RE/MAX, las principales mejoras que los vendedores planean hacer antes de vender son en el baño (49%) y en la cocina (48%).
¿Qué tipo de mejoras son necesarias en la cocina y el baño? Los agentes expertos de RE/MAX tienen las respuestas, pero todo empieza por entender a qué tipo de mercado inmobiliario se enfrentan los vendedores.
Encontrar el equilibrio en las actualizaciones
Dado que la cocina y el baño son las dos estancias más funcionales de una casa, renovarlas puede ser primordial antes de ponerla a la venta. Sin embargo, según algunos agentes inmobiliarios, una reforma completa no está necesariamente justificada. De hecho, debido a los costes y el tiempo, el método del todo o nada no es el único camino a seguir.
No es necesario destrozar la cocina, es posible hacer pequeñas actualizaciones que ayuden a elevar el ambiente general de la habitación, como cambiar las lámparas y los herrajes. Por una inversión menor, se puede conseguir un gran impacto en cualquier tipo de vivienda.
Las cosas más fáciles de reemplazar son por lo general los materiales de construcción incluyendo grifos, luces y accesorios.
También es recomendable darle una mano de pintura a las paredes y renovar los pisos. En el caso de las cocinas, muchos vendedores repintan o reforman los armarios, cambian las encimeras por una opción más moderna, como el granito, o incluso invierten en electrodomésticos nuevos, como una nevera de acero inoxidable o un horno moderno. En el caso de los baños, los vendedores suelen pintar o renovar el lavamanos, o cambiar el espejo por otro de diseño y forma diferente.
Evaluar las ventajas y los riesgos
Para los vendedores, hacer estas inversiones en beneficio del valor de reventa, aunque sean financieras, también son cuestión de tiempo y paciencia. Pero puede valer la pena.
La remodelación justifica un precio de venta más alto, ya que un comprador verá todas las cosas nuevas que no va a tener que reemplazar. Al final del día, todo se reduce al presupuesto del propietario, y de cualquier manera, la casa probablemente se venderá, especialmente cuando está siendo representada por un profesional de bienes raíces con un historial de éxito.
Los precios se ajustan constantemente, pero si una casa tiene una cocina nueva, completamente remodelada en los últimos dos años, es un factor sorpresa, que con el precio adecuado puede aumentar la posibilidad de venta.
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