
Antes de poner tu casa en venta, asesórate con un agente inmobiliario para mejorar la presentación de tu inmueble. Un agente puede decirte qué esperan los compradores en tu mercado y ayudarte a encontrar el precio de tu casa. Los siguientes 10 pasos son una forma de empezar con el pie derecho la preparación para vender tu casa.
1. Da la bienvenida a los compradores. Haz que tu puerta principal sea visible y accesible para los compradores. Pinta la puerta, limpia el camino y el jardín, corta el césped y poda los arbustos. Arregla las mallas, timbres, etc. rotos. Arregla las rejas, timbres, tejas e iluminación exterior rotos, y sustituye el felpudo. Los defectos exteriores pueden causar una mala primera impresión a los compradores.
2. Haz que brille. La limpieza implica que una casa ha sido bien cuidada, por lo que una limpieza a fondo puede ganar puntos con los compradores. Los compradores examinan minuciosamente las casas, sobre todo las cocinas y los baños. Pinta y vuelve a aplicar sellador para dar a estas estancias propensas a la suciedad un aspecto fresco y limpio. Limpia alfombras y manijas para eliminar manchas antiestéticas y eliminar olores. Ordena todas las habitaciones, incluidos los armarios y el garaje, antes de enseñar la casa. Y si te parece desalentador hacer toda esa limpieza tú mismo, plantéate contratar a una empresa de limpieza profesional para que se encargue de todo por ti.
3. Empieza a guardar. Las habitaciones estrechas y desordenadas desaniman a los compradores y hacen que la casa parezca más pequeña. Una casa repleta de objetos personales también dificulta que los demás se imaginen viviendo en ella. Empieza por guardar el exceso de muebles, juguetes y adornos personales, como fotos familiares. Recoge las cosas que no utilizas a diario y guárdalas o pídele a un amigo que te las guarde. Despejar tu casa también te dará ventaja para la mudanza.
4. Pinta bien. Un trabajo de pintura bien hecho y sin lujos es todo lo que necesitas. Da una mano de pintura fresca a las paredes blancas o beige, y vuelve a pintar las que tengan colores excéntricos o poco convencionales. Los colores neutros inspirados en la naturaleza y el spa, como el gris topo y el gris sutil, son las mejores opciones. No te olvides tampoco de las tapicerías y las molduras. Y un trabajo de pintura fresca en los gabinetes anticuados o desgastados va un largo camino, también.
5. Arregla los pequeños detalles. Repara o sustituye los herrajes rotos o anticuados de toda la casa. Puedes instalar nuevos pomos de puertas, grifos, toalleros y barras de cortina, accesorios que los compradores ven fácilmente, por muy poco dinero. Unos nuevos accesorios en el baño, la cocina y las ventanas y puertas también mejoran la funcionalidad y seguridad de estos elementos.
6. Actualiza la iluminación. Sustituye las lámparas decorativas que ya no encajen con el aspecto más limpio y fresco de tu casa. Instala bombillas nuevas con la iluminación adecuada para zonas concretas de tu casa. Por ejemplo, la iluminación ambiental, de bajo perfil, llena una habitación, mientras que la iluminación direccional o de trabajo funciona mejor en zonas como un rincón de lectura. Utiliza la iluminación de fondo para resaltar los puntos focales de una habitación, como las obras de arte sobre la repisa de la chimenea, y atraer la atención de los compradores hacia determinados puntos de interés.
7. Enmarca las ventanas. Asegúrate de contar con los marcos de ventana adecuados, que realcen la luminosidad natural y mejoren el aspecto de una casa. Las cortinas también pueden influir en la temperatura de una habitación porque reducen o aumentan la cantidad de luz que entra en el espacio. Ajusta las cortinas adecuadamente cuando enseñes tu casa por la mañana, por la tarde y por la noche.
8. Pon la mesa. Unas flores frescas y decorativas en la cocina o en la mesa del comedor son siempre un buen detalle. Además, ten a la mano los cubiertos para las mesas, de modo que puedas colocarlos rápidamente justo antes de una visita o una jornada de puertas abiertas. En el comedor, pon todos los detalles formales, y en la cocina, mantén una mesa informal.
9. Esconde los objetos cotidianos. Traslada las cajas de arena, los platos de las mascotas, los juguetes, las jaulas de los animales y los juguetes de los niños a zonas menos visibles de la casa, como un almacén exterior o el garaje, antes de cada exposición o jornada de open house. Piensa también dónde puedes guardar cosas como la ropa sucia y las esponjas sucias de la cocina.
10. No olvides la parte de atrás. Mantén tu patio trasero espacioso y funcional. Planta flores de colores y mantén el jardín ordenado. Recoje sistemáticamente los excrementos de sus mascotas para que los compradores se sientan cómodos recorriendo el jardín.
